En el tie break, las fuerzas respetaron a Gulbis que no desaprovechó la oportunidad. El suizo flojeó y se marcha a las primeras de cambio a casa. Una nueva decepción para un desconocido Federer.
Victoria a lo grande de Nadal
Con un tenis sólido, sustentado sobre todo en la efectividad de su saque y en un gran resto, Verdasco se impuso a un Soderling muy errático, que nunca dio la sensación de poder llevarse el partido.
Aunque ambos tenistas ya habían ganado en tierra, se desenvuelven mejor en pistas rapidas. Ambos tienen un buen saque, y prefieren ganarse los puntos a que se los regale el rival y, cuando no tienen su día, acumulan en su estadística muchísimos errores no forzados.
Bajo esa premisa se desarrolló el partido, poco acorde con el estilo de juego más elaborado y de peloteo que requiere la tierra batida, y donde el número nueve superó al ocho del mundo.
Soderling, un jugador de esos que, si entra entonado, suelta el martillo pilón que tiene como derecha, y no te da opción alguna, aunque una vez mas el sueco demostró que en las finales le entra el miedo escenico, como ya pudimos ver el año pasado en la final de Roland Garros contra Federer.
Aunque Verdasco tampoco andaba muy allá en cuanto a golpes precisos durante la primera hora de juego, pero rápidamente se dio cuenta de que, tal como estaba Robin, mejor no tomar riesgos y dejar que fuese él quien sumara errores.
Y así, el primer set acabó siendo lo que hizo Verdasco entre fallo y fallo de su adversario. El madrileño, muy sólido con su servicio, logró romper el de Soderling en el séptimo juego, y volvió a hacerlo en el noveno, cuando necesitó tres bolas de set para cerrar el primer parcial (6-3) antes de lo previsto.
Estaba claro que en la segunda manga, el sueco tenía mucho margen de mejora. Y así fue. Rompió a Verdasco en el primer juego y, pese a que cedió su saque en el siguiente, su tenis siguió subiendo enteros.
Soderling empezó a calibrar su drive, y sobre todo, a acertar en los puntos decisivos. Salvó una bola de 'break' que hubiese puesto a Verdasco con un casi definitivo 4-2 en el marcador, y rompió de nuevo en el siguiente para cerrar el set por 4-6.
Sin embargo, en el tercer parcial reaparecería la versión de "Mr. Hyde" de Soderling, con el agravante de que, a esas alturas del partido, la zurda de Verdasco ya se había engrasado.
Fer estuvo impecable devolviendo los saques del cañonero sueco (algunos superaban los 220 Km/h), y tremendamente efectivo a la hora de sacar adelante el suyo, el madrileño logró romper la tercera manga con un 'break' que le colocó 3-1 y servicio.
Ahí acabó la final. Un Fernando Verdasco paciente, ya no dio opción para la sorpresa. Movió a Soderling hasta obligarlo a fallar una vez más o concederse una nueva oportunidad para resolver el punto. Ni siquiera le costó cerrar el partido -algo habitual en estos casos- para colocar el definitivo 6-3 con su servicio.
El madrileño ganó su quinto título ATP de su carrera, el segundo este año tras el de San José, y se convierte en el vigésimo español que vence en la tierra de Barcelona. Soderling podía haber sido el quinto sueco, pero para seguir los pasos de Davidson, Borj (2), Wilander (3) y Carlsson (2), tendrá que esperar a mejor ocasión.
Un Verdasco, que desde mi punto de vista, ha hecho uno de los mejores partidos de su carrera, moviendo muy bien a su rival, hasta obligarlo a cometer el error. Muy sólido desde el fondo de la pista, y con una zurda impecable. La verdad es que para ser sinceros en mi apuesta no entraba la victoria del jugador madrileño, pero ahora estoy encantado de haberme equivocado, porque Fer ha cerrado muchas bocas; necesitaba un triunfo así para motivarse. Quizás en otro día, y en otro lugar Soderling hubiese ganado, pero este era el día de Fernando ¡Enhorabuena! y suerte para Roma.
El mejor porcentaje de primeros saques y los 57 puntos ganadores por los 41 de Ferrer, fueron algunos de los aspectos en los que Rafa se basó para obtener la victoria y ampliar su dominio sobre Ferrer que ahora pasa a ser 10-3.
Verdasco, por su parte, alcanzó la primera final de un Masters 1000 de su carrera y, de esa forma, la competición monegasca tendrá de nuevo un campeón español.
No le tembló el pulso a Verdasco. A pesar de encontrarse ya por vez primera en la semifinal de un torneo de este calado y por tener enfrente al primer cabeza de serie, finalista el pasado año, con el que había perdido las cinco últimas ocasiones en las que coincidió.
El madrileño, que sólo había ganado en dos ocasiones al balcánico, en los dos primeros enfrentamientos que disputaron, había perdido las cinco más recientes. En todas las superficies.
Verdasco, que rentabilizó sus ocasiones en el quinto juego del primer set, donde dispuso de tres puntos de rotura, más las del segundo, donde Djokovic se marchó del partido, se medirá entonces a Nadal, con el que ha perdido en las nueve ocasiones que han jugado.
La verdad es que este torneo ha sido bastante descafeinado, por la ausencia ya sea por motivos de dosificación o por lesiones de muchos jugadores del top ten, Federer, Del Potro, Davydenko, Soderling, Roddick, y otros tan talentosos como Monfils.
Con mas top tens en la pista, siento decir que esta final española no se hubiera producido.
Desde el año 2002, no se habia producido tal caso en una final de Master 1000, y fueron Ferrero y Moya los protagonistas.
Suerte a Rafa y a Fer, y que gane el mejor.
Djokovic ganó sin dificultades el primer set y en el segundo rápidamente consiguió el quiebre de saque que le dio más tranquilidad y le permitió adelantarse 3-1. Pese a su menor porcentaje de primeros servicios (53 % frente al 62 % del cordobés), el serbio fue mucho más efectivo con su servicio.
Nalbandian dispuso de dos bolas de rotura en el séptimo juego del segundo set, pero Djokovic las salvó para ponerse 5-3 arriba y rematar el encuentro con un nuevo rompimiento. La clave fue la regularidad del europeo, ante un Nalbandian que cometiió muchísimos más errores no forzados y que sufrió molestias en su pierna izquierda, como consecuencia de la falta de competencia al más alto nivel.
El serbio cerró ganando nueve de los últimos 11 puntos, luego que el argentino se puso 15-40 en el octavo game del segundo set y el ganador con el saque en su poder. Pero el favorito levantó esas dos bolas de quiebre y al final triunfó cuando Nalbandian dejó una pelota en la red.
Nalbandian consiguió así su mejor resultado desde el Masters 1000 de París en octubre de 2008. Sigue levantando la puntería tras su regreso y está ilusionado en destacarse en esta tradicional gira europea de canchas lentas, que desembocará en el Abierto de Francia.
De esta forma, el serbio amplió su ventaja en el historial contra Nalbandian a tres victorias (las restantes en el Masters 1000 de Canadá 2007 y en Queen's 2008) frente a una del argentino (se impuso en el Masters 1000 de Madrid 2007).
Un año después de perder la final frente a Nadal, que obtuvo de esa forma su quinto título en Monte-Carlo, Djokovic sigue aspirando a quebrar la racha victoriosa del español en el Principado. Igual, es consciente de que todavía le queda otro encuentro por delante y que una hipotética definición con el zurdo ex rey sería muy complicada.
Por lo tanto, Djokovic se medirá en la semifinal por el sector superior de la llave con Fernando Verdasco, el sexto preclasificado, quien le ganó el duelo español a Albert Montañés por 6-3, 6-7 (4-7) y 6-0, en dos horas y seis minutos.
Por su parte, Nadal, segundo cabeza de serie, sigue aspirando a su sexto título seguido en Monte-Carlo tras ganarle en cuartos de final a su compatriota Juan Carlos Ferrero por 6-4 y 6-2, en un partido que tuvo que ser interrumpido al inicio por la lluvia y el viento. Su próximo rival será otro español, David Ferrer. El marcador del encuentro con 3-2 a favor de Ferrero, noveno preclasificado, resultó determinante. Nadal, que había comenzado con un 2-0 a favor, cedió tres juegos consecutivos visiblemente molesto por el viento.
Finalmente, el juez de silla, el francés Pascal Maria, junto con los responsables del certamen, optaron por detener el encuentro hasta que mejoraran las condiciones.
Y, a la vuelta, poco más de media hora después, reapareció el gran Nadal para deshacerse de Ferrero, ganador en Monte-Carlo en 2002 y 2003 y siendo el jugador que más partidos ganó en canchas lentas este año, tras adjudicarse los títulos de Buenos Aires y Costa do Sauípe, además de alcanzar la final de Acapulco (perdió con Ferrer).
El balear, que había caído en su último duelo ante Ferrero (en Roma 2008), metió otra marcha en la reanudación para, tras el 4-3 para el valenciano, enlazar tres juegos y llevarse el primer set por 6-4. Así encarriló el segundo capítulo, al quebrarle el servicio a su rival en el juego inicial.
El rendimiento de Ferrero, ex campeón de Roland Garros y rey del circuito ATP, bajó enteros por el potencial de Nadal, ex cuádruple ganador en París, que se disparó irremisiblemente, sin oposició, hacia una nueva semifinal en Mónaco.
"Creo que tuve la oportunidad de ganar más games, pero no lo hice", comentó Ferrero. "Nadal siempre está ahí, siempre está donde tiene que estar. Siempre juega mejor en los momentos importantes", agregó.
Aunque Ferrero dio pelea en la mayoría de los intercambios desde la base, en algunas ocasiones dándole problemas a Nadal con su cambio de ritmo, se quedó corto en la selección de sus disparos cuando buscaba 'winners'. "Muchas veces dominé los puntos y no pude terminar bien. Quizá necesité un poco más de potencia", aclaró.
En semis, Nadal tendrá como adversario el sábado a Ferrer (11° cabeza de serie), quien derrotó previamente al alemán Philipp Kohlschreiber por 7-5 y 7-6 (7-1). Nadal tiene ventaja de 9-3 en sus enfrentamientos con Ferrer.
Por su parte, Fernando Verdasco, inauguró una nueva página de éxito en su trayectoria deportiva al clasificarse por primera vez para las semifinales de un torneo Masters 1000 en Montecarlo con un 6-3, 6-7 (4) y 6-0 sobre el catalán Albert Montañés.
Verdasco, que firmó el último set en blanco después de desperdiciar tres bolas de partido durante la segunda manga, no dio opciones al jugador de Sant Carles de la Rápita en el tercero, pese a la excelente reacción de éste para levantar un 1-5 y empatar a un set cuando parecía destinado a despedirse del torneo por la vía rápida.
Montañés tuvo dificultades para acoplarse al encuentro en el primer set. La pista central de Montecarlo se le hacía grande ante los reveses y los ajustados golpes de derecha de Verdasco, a quien no pesaban ciertas complicaciones con el servicio. El catalán se situó a un juego del cabeza de serie número seis (2-3), pero Verdasco le dominó para anotarse el set (6-3). Un par de dobles faltas decidieron el final del primer set y el juego inicial del segundo.
Montañés rompió el saque de Verdasco para apuntarse el 0-1. Sin embargo, Verdasco le devolvió la rotura, igualó a un juego y el catalán se sumió en un bache de juego que dejó la segunda manga y la victoria prácticamente en manos del madrileño (5-1). Pero entonces surgió el mejor Montañés de la tarde. El jugador de Sant Carles de la Rápita resurgió para ganar cinco juegos seguidos. Aun así, Verdasco tuvo tres bolas de partido. No las materializó y Montañés logró el 6-6 y el empate con 4-7 en el desempate.
El esfuerzo del catalán, no obstante, se vino abajo en el tercer tramo, en el que Verdasco no cedió ni un solo juego (6-0). El madrileño cerró así su primera presencia en las semifinales de un Masters 1000, donde tendrá como rival al serbio Novak Djokovic.
De esta manera, queda garantizada la presencia de un jugador español en la final del próximo domingo en el Principado de Mónaco, en este tradicional torneo dotado con 2.543.750 euros en premios y que se disputa en canchas de arcilla.
Nadal, ganador de las últimas cinco ediciones de este torneo, puso un mensaje de advertencia para sus próximos rivales en polvo de ladrillo, tras vencer al alemán Michael Berrer por 6-0 y 6-1 en apenas 55 minutos. El de Manacor, que sumó su 29ª victoria consecutiva en el certamen, estuvo cerca de ganar sin perder un sólo juego por primera vez en su carrera, pero Berrer logró quedarse con el sexto game del segundo set. En los primeros 11 juegos del segundo choque entre ambos, el germano obtuvo sólo 11 puntos y en total ganó 18 de 69 puntos en el encuentro.
El mallorquín de 23 años cerró el primer set en cero en 23 minutos. Esta semana busca igualar el récord histórico de Reggie Doherty, quien ganó seis títulos (1897-99, 1902-04) en los 104 años del torneo, y de paso capturar su primer título en el circuito en 11 meses.
En cuartos de final, Nadal chocará con su compatriota Juan Carlos Ferrero, 9° favorito, que superó al francés Jo-Wilfried Tsonga (5°) por 6-1, 3-6 y 7-5, en dos horas y 14 minutos de juego. El ex número uno del mundo convirtió 4 de 11 oportunidades de quiebre, y soportó 8 aces de Tsonga, para avanzar a cuartos de Monte-Carlo, donde ganó el título en 2002 y 2003.
En tanto el español Fernando Verdasco, 6° favorito, venció al checo Tomas Berdych (10°) por 5-7, 6-3 y 6-2 en dos horas y 34 minutos de juego. El madrileño obtuvo el primer quiebre de servicio en el primer juego del partido, pero Berdych lo recuperó en el sexto game para quedar 3-3 y luego cerrar la manga tras 66 minutos con la segunda doble falta del español.
En el segundo parcial, Verdasco quebró en el tercer y noveno juegos para quedarse con el capítulo en 43 minutos, ganando 16 de 19 puntos con su servicio y convirtiendo dos de cuatro puntos de quiebre. En el tercer set hubo tres quiebres sucesivos antes que el ibérico se pusiera 5-2 arriba y aprovechara su primer punto de partido cuando a Berdych se le quedó la pelota en la red.
Verdasco, campeón del ATP de San José esta temporada, se encontrará con su compatriota Albert Montanes en cuartos de final, a quien superó en los 3 enfrentamientos previos.
Montañés protagonizó la sorpresa de la jornada eliminando al croata Marin Cilic, 4° favorito, consiguiendo la cuarta victoria de su carrera ante un jugador Top 10 (4-20). El español convirtió 4 de 8 puntos de quiebre para vencer al número 9 del mundo, el croata por 6-4 y 6-4 en una hora y 37 minutos.
Otro español que avanzó fue David Ferrer (11°), que derrotó al croata Ivan Ljubicic (8°) por 6-0 y 7-6(4) en sólo 90 minutos. Ljubicic perdió un set 6-0 por séptima vez en sus 12 temporadas como profesional. Ferrer, ganador del ATP de Acapulco esta temporada, alcanzó su vigésimo triunfo del año (14-1 en polvo de ladrillo), y ahora se medirá con el alemán Philipp Kohlschreiber que se deshizo de su compatriota Philipp Petzschner, por 6-3 y 6-4.
Por su parte, Ferrero hizo un partidazo para batir a la bestia Tsonga por 6-1 3-6 7-5. El de Onteniente confesó que está muy orgulloso del juego que está desplegando en el Principado. "Yo quería ganar el partido porque sé que estoy jugando muy bien el torneo. Los dos encuentros que he jugado he golpeado la bola muy bien y he dominado durante todo el tiempo", admitió.
Ahora Ferrero se medirá en cuartos de final a Rafa Nadal, que venció sin dificultad al alemán Michael Berrer. El ex número 1 explicó cuál es el truco para vencer a su compatriota. "Ganar un punto más que él", dijo.
El enfrentamiento empezó de la peor manera posible para el escocés que entraba en el de forma fria y muy nervioso. El alemán comenzaba rompiendo el servicio de Murray que paracía un juguete roto en manos de un niño. Eso le pasó factura a Andy que iba de mal en peor. Kohlschreiber cada vez jugaba mejor y crecía en el encuentro, por ello le volvió a robar el saque con lo que Murray dio por perdido el set (6-2).
En el segundo pasó tres cuartos de lo mismo, esta vez solo una vez consiguió mantener su servicio Murray. Cuando el partido transitaba 1-1 en la segunda manga, Kohlschreiber volvio a dar un zarpazo al saque del británico. Murray intentó reaccionar pero fue inútil, el escocés estaba fuera del partido y pronto se dio por vencido.
A Murray se le vio impotente, imcapaz de enlazar buen juego de forma seguido. Primero fue Miami y ahora Montecarlo. ¿Qué pasará en Roma?
Pasan a octavos Montañés, Djokovic, Nadal, Ferrer y Ferrero
El resto de favoritos no solo no están teniendo problemas para pasar de ronda, sinó que lo están haciendo por la vía rápida. Tal caso ha sido el de Nadal que se deshacía del holandés De Baker con un contundente 6-1 y 6-0. El serbio Novak Djokovic eliminó sin un solo apuro a Florent Serra con un tanteo de 6-2 y 6-3. Por su parte, Ferrer apeó al desconocido Golubev con un resultado similar (6-2 y 6-3). Su paisano Ferrero se impuso a Becker con un marcador de 6-3 y 6-4. Mas sufrimiento tuvo el catalán Albert Montañés que se merendó a Andreas Seppi. Entre los españoles también pasan a octavos tanto Robledo como Fernando Verdasco.
Roddick, sexto cabeza de serie, demostró más solidez que su rival y logró el triunfo, gracias a su poderoso saque, con el cual se le ha notado una mejoría espectacular, ya que lo ha sabido variar a las mil maravillas, ha sacado liftado, plano, colocado, etc. Tras un disputado inicio de partido, la primera manga se resolvió para el lado del de Nebraska tras un intenso duelo de golpes con Berdych, que durante algunas fases del set inquietó a su adversario. En la recta final del primer set, con un 5-5 el checo se puso mas nervioso de la cuenta, y regalo una bola de break a Andy que la supo aprovechar gracias a uan derecha cruzada que Tomas mandó al pasillo del doble, poniendose 5-6 y rubricando el set con su servicio.
Ambos tenistas mantuvieron su saque sin problemas y de hecho hubo que esperar hasta el décimo juego (5-5) del partido para ver dos bolas de ''break'' a favor de Roddick, cuando el checo empezó a ponerse nervioso. El norteamericano desaprovechó la primera, pero resolvió en la segunda gracias a una derecha cruzada que Tomas envio al pasillo del doble, y Andy refrendó el set a su favor (6-5) con su servicio.
El segundo set comenzó de manera diferente y pronto se resolvió del lado del de Nebraska, que se benefició del desconcierto del checo, y le rompió el saque en el primer juego. El cambio de actitud del estadounidense, más peligroso en el resto. Viendo una versión de Andy que nos recordó a la del Roddick de semifinales contra Nadal, muy sólido desde el fondo de la pista, muy buena defensa, y muy agresivo al ataque. Otro golpe que Roddick ha mejorado con su coach, Larry Stefansky ha sido el revés cortado, el cual ha empleado a lo largo del torneo, y que ha llegado a desquiciar a Nadal en semis, y al propio Tomas en la final. Este nuevo arsenal de Andy fue vital para lograr la ventaja, que se convirtió en insalvable para su rival.
A partir de ahí, supo administrar su ventaja y poco a poco Berdych bajó los brazos, impotente ante un Roddick superlativo, que no dejó ningún resquició para la reacción a su oponente. Un Andy que buscaba sangre a su rival. En ningún momento dio la sensación de que el checo pudiese romperle el saque. Tras el 5-3 Berdych salvó con gran brillantez dos matchball que tuvo en contra, pero en el siguiente juego, el tenista local rubricó una gran victoria con su servicio.